LOS AÑOS QUE NOS DEJA
Cruzando todos los días esa puerta con la sonrisa de oreja a oreja llega a visitarnos con sus ocurrencias. Solo usted nos hace levantar la cabeza, solo usted nos distrae de las tareas para prestar atención a su buen sentido del humor. Esta tarde nos llenó el alma de su emoción, vimos humedecer sus ojos y el deseo de llorar después de tanta risa. ¡Tranquilo! que todos desafinamos alguna vez, por no decir todas las veces que no nos escuchan. Sí… todos tenemos el derecho a llorar para soplar un año más de nuestras vidas. La acumulación del tiempo se celebra con pastel y hoy notamos su preocupación porque mientras unos reciben juventud usted recibe a la vejez. Abuelo… y ¿si supiera los años que nos deja?, permítanos decirle que todos sus años están trabajados con sus manos, afianzados con sus huellas, sufridos con sus venas, felices con la capacidad y el optimismo de su mente. Los años que nos deja se que...